Las rosquillas de anís se llaman también "rosquillas tontas" ya que no llevan ningún tipo de acabado y son, por lo tanto, muy sencillas de hacer.
Aunque se consideran un dulce típico de Semana Santa, en realidad se
consumen durante todo el año, especialmente cuando hace frío y las
tomamos acompañadas de chocolate caliente.
Como dije al principio es una receta superfácil, aquí os la dejo:
Ingredientes:
-200 g de azúcar
-200 ml de leche
-200 ml de zumo de naranja
-700 g de harina
-150 ml de aceite de oliva
-1/2 copa de anís
-3 huevos enteros
-1 cucharadita de postre de canela molida
-1 sobre de levadura
-Raspadura de 1/2 limón
-1 litro de aceite para freir
-Azúcar para rebozar las rosquillas una vez hechas
Preparación:
1.-En un bol batimos muy bien los huevos con el azúcar y vamos añadiendo la leche, el zumo de naranja, el aceite, la ralladura de limón, el anís, la canela y por último la harina y la levadura tamizadas. No debemos incorporar un ingrediente hasta que no esté totalmente integrado el anterior. Deberá quedarnos una masa fina y sin grumos.
2.-En el sartén, con abundante aceite y cuando esté caliente vamos poniendo la masa que freímos por ambos lados. A continuación las colocamos sobre papel secante para luego espolvorearlas con azúcar a nuestro gusto.
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